Lo siguiente que
recuerdo es estar saliendo del elevador del salón del
hotel. Un pianista
estaba sentado frente a su instrumento entonando una
canción sobre gente
necesitando gente. Pero yo no necesitaba a nadie. Quería
dispararles, ¿no?
Caminé a paso firme hacia el casino, con el arma metida a mi
espalda, bajo mi
remera.
“Hey, es la dama de
la Suerte!!” George Mitchell Tercero se abalanzó sobre
mí.
“Qué haces todavía
aquí, George?” le pregunté.
Se suponía que
también debía matarlo? Sentí una gota de sudor correr por mi
cara. La limpié.
“Sólo me estaba
despidiendo de las mesas. Te juré que no regresaría y soy un
hombre de palabra.”
“Eso es bueno,
George. Será mejor que te vayas.”
“Sí, ya me estoy
ensillando y preparando para salir.” Me hizo un saludo con
su sombrero,
entonces notó mi cara. “No luces muy bien, cariño.”
“Me siento algo
extraña.”
“Ve a recostarte.
Quítate el peso de encima. Quieres que busque a alguien por
ti?”
Me froté la frente.
Quería a alguien. A Peter. Él estaba cerca.
“A tus padres?”
Artistas. Arte. No
sabía que comprendías el arte. Viejos Maestros. Capas.
Eran importantes
pero no podía recordar por qué. Las imágenes se movían en
mi cabeza como si
el viento desplazara las hojas en una de mis novelas gráficas,
abriendo páginas al
azar.
“Estoy bien. Iré a
mi habitación en un momento.”
“Haz eso cariño.
Fue un placer conocerte.”
“Y a ti, George.”
Se dio la vuelta,
alejándose a paso relajado.
Dispárale.
No!
Saca el arma y
dispárale.
Mi mano se deslizó
alrededor del arma en mi cintura, los dedos rodeando la
culata, llevándola
más cerca. Entonces alguien gritó – María Kelly corrió hacia
el guardia de
seguridad y me apuntó.
“Ella tiene un
arma!” gritó.
Miré hacia mi mano.
Tenía una. Se suponía que corriera y la disparara al
azar.
Hazlo.
Viejos Maestros.
Falsos recuerdos. Rasgar más profundo.
El guardia de
seguridad tocó la alarma. Me quedé indecisa en medio del
casino mientras los
jugadores de zambullían en busca de cubierta. Una máquina
tragamoneda emitía
el pago por un juego ganado a un asiento vacío.
“Cielos, cariño, no
querrás disparar esa cosa!” gritó George desde un seguro
lugar al otro lado
de una mesa de pinball.
Mi cerebro me
gritaba que actuara. No pude contenerme – elevé la punta
hacia el techo y
apreté el gatillo. El retroceso fue impresionante, sacudiendo mi
muñeca. Una araña
se rompió. Cómo pude haber hecho eso? Estaba atrapada en
una pesadilla en la
que mi cuerpo y mi cerebro ya no estaban bajo mi control.
Así – ahora apunta
a la gente.
No, esto estaba
mal. Odiaba las armas. Miré hacia abajo, a la enorme cosa
negra en mi mano
como si fuera un crecimiento canceroso, queriendo tirarla
pero mi mente me
gritaba que empezara a disparar.
Entonces, saliendo
ruidosamente de entre los pisos superiores del hotel,
el FBI entró al
casino, haciendo a un lado a los de seguridad. Debo haber
lucido extraña, de
pie en medio de un piso vacío, rodeada de cartas y fichas
desparramadas, con
una ruleta sonando, pero sin hacer ningún esfuerzo por
defenderme.
“Lali, tira el
arma!” gritó Víctor. “No quieres hacer esto. Ésa no eres tú.”
Traté de soltarla
pero mis dedos no cedían, mi cerebro haciendo caso omiso
del comando.
Gira el arma hacia
ti misma. Dí que te matarás si se acercan más. Las
palabras de Daniel
Kelly llevaron el cañón bajo mi oído.
“No se acerquen
más,” dije con voz temblorosa.
Hubo un grito a mi
izquierda. Los guardias de seguridad estaban conteniendo
a mis padres,
mientras intentaban alcanzarme.
“Lali, qué estás
haciendo?” gritó Sally, con su cara pálida.
“Vamos, cariño,
baja el arma. Necesitas ayuda. Nadie ha salido herido – te
conseguiremos
ayuda,” dijo Simon desesperado.
De alguna manera
sus palabras no lograron penetrar. Eran más poderosos los
susurros de que
debía acabar con todo, castigar a los Lanzani por usarme.
“Manténganse atrás
– nadie se acerque más!” Mi dedo se aferró más al
gatillo. Parecía no
existir otra salida.
Entonces Peter
apareció desde atrás de Víctor, sacando a su hermano de un
empujón cuando
intentó detenerlo.
Continuara....
Recien vuelvo de ingles, okey obviamente no jaja me colgué haciendo otras cosas!
¿Quieren más?
+ 15 firmas y otro!
Más
ResponderEliminarMasss nove! Porfa publica otro cap ahorita!me encana
ResponderEliminar@nathies1024
M
ResponderEliminarA
ResponderEliminarS
ResponderEliminarQue no le dispare a nadie porfa
ResponderEliminar@otralanzanita
Subí más porfaaa
ResponderEliminar@otralanzanita
me encanche con tu nove.. plos uno mas!
ResponderEliminarEstá nove es una de las mejores adaptaciones que leí
ResponderEliminarMe gusta mucho está noveee
ResponderEliminarAyyyyy Dios! Pobreee Lali! Quiero saber que va a hacer Peter y que va a pasar con ella ya! Jajajajaja que tarde volverias de inglés ;) jajaja maaaas por faaaaa! Breen :)
ResponderEliminarQueremos noveee noveee noveee
ResponderEliminar+ + +
ResponderEliminarSubí otrooooi
ResponderEliminarLaa estupidaa de yo no habia visto que habias subido uno anteees
ResponderEliminarMAAAS MAS MAS
Beso,Anto
awww noooo ¿como fue que llegamos hasta aqui??
ResponderEliminarPeter al rescate
ResponderEliminarojala no pase nada
ResponderEliminarnovela solo tu: http://morithalaliter.blogspot.mx/
Por amor a dios que no le dispare a Peter!!!!!!!!!!!! :,( @LuciaVega14
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