jueves, 31 de mayo de 2012

Capítulo 29:

—Me aseguraré de que tengas una buena montura.
—No vayan demasiado lejos —los advirtió Thiago—. Habrá una tormenta.
—No necesito una niñera —contestó Peter, enfadado.
Mariana empujó el plato, ya no tenía hambre. Quizá ayudara alejarse un tiempo. Quería relajarse por una vez, sin preocuparse de mirar por encima del hombro.
Peter se levantó.
—¿Estás lista?

Capítulo 28:

Mariana se deslizó en el asiento de detrás, junto a Peter, mientras que Juan se sentó delante. A pesar del calor del abrigo, temblaba. Principalmente, por los acontecimientos de la última hora.
A su lado, Peter se sacó el abrigo, quedando en una camisa que moldeaba perfectamente sus músculos.
Ella no quería nada más que esconderse en aquel pecho, pero dudó. Aún no estaba segura de que relación tenía con Peter. Parecía desconfiar de ella. Así que miró por la ventana y esperó la llegada de Thiago.

miércoles, 30 de mayo de 2012

Capítulo 27:

Vio el dolor en los ojos de Maria y anheló no haber sido él el culpable.
—Debemos irnos —dijo Peter, hablando por primera vez—. Va a nevar.
—Necesito que ella firme la declaración —dijo Maria—. Después, se podrán ir —buscó en su mesa y encontró un papel y un bolígrafo. Mariana los agarró y miró el papel en blanco.
—¿Qué debo escribir? —preguntó suavemente.
—Cualquier cosa que quiera —contestó Maria—. No quiero estar casada. O estoy calentando las mentes de cuatro hombres —encogió los hombros—. Solo hazlo rápido. Tengo trabajo que hacer.

martes, 29 de mayo de 2012

Capítulo 26:


Los ojos de Pablo llamearon por la sorpresa.
—Pequeña y chantajeante zorra.
Ella apretó los dientes.
—Voy a salir de aquí, y nunca voy a volver contigo. Si te vulves a acercar a mí, si te atreves a decir mi nombre, voy a hacer que pudras en la prisión.
La sorpresa creció en los ojos de Pablo. Él iba a herirla. Podía leer eso en su expresión. Bien, eso estaba bien. Porque se aseguraría de que no volvería a hacerlo.
La puerta se abrió y entró Maria.

domingo, 27 de mayo de 2012

Capítulo 25:


—¡No podemos dejarla ir! —dijo Juan.
Peter permanecía donde lo dejó Mariana, con los ojos en la puerta.
Thiago se pasó la mano por el pelo, preguntándose que demonios han hecho.
—No confío en aquel bastardo. Voto que bajemos la montaña y nos quedemos vigilando las cosas. Si Mariana nos necesita, iremos. Será mejor que quedarnos sentados aquí.

sábado, 26 de mayo de 2012

Capítulo 23 y 24:


Capítulo 23:


—Pablo está aquí —lloró—. Él me encontrará.
Tomó su barbilla y la forzó a enfrentarlo.
—Vístete y reúnete con nosotros en la sala. Te contaremos lo que hemos planeado hacer.
Ella lo miró fijamente, atreviéndose a esperar que pudieran mantenerla a salvo y evitar así ser la causa de sus muertes.
Él se incorporó y la besó en la frente.
—Tus ropas están en el primer cajón —salió, dejándola vestirse.

miércoles, 23 de mayo de 2012

Capítulo 22:


Mariana abrió los ojos y parpadeó, para ajustarse a la oscuridad. Sentía el cuerpo calentito, y dejó salir un bostezo.
Estaba fundida contra el pecho de Thiago, sus manos alrededor de ella. Un hombre desnudo la apretaba por detrás, y miró por encima del hombro, intentando ver si era Juan y Peter.
Por lo que podía ver, era Juan. Frunció el ceño. ¿Dónde estaba Peter?

martes, 22 de mayo de 2012

Capítulo 21:




La polla de Peter en su boca, las manos de Thiago en sus pechos, Juan profundamente en su coño. Era demasiado. Aguantó cuanto pudo.
Peter le llenó la boca de crema, Juan se enterró profundamente y se vació dentro de ella. Ella se arqueó salvajemente bajo ellos, espasmos mecían su cuerpo.
Juan se deslizó fuera de ella y se dejó caer sobre su vientre, su aliento salía en ráfagas entrecortadas. Peter sacó la polla de su boca y la abrazó.

lunes, 21 de mayo de 2012

Capítulo 20:



Sigue lo zarpado! no me hago cargo, yo avise ;)  


Juan empezó a chupar un pezón. Luego el otro. Cerró los ojos y abrió la boca en un grito mudo.
Peter deslizó un dedo dentro de ella. Luego dos. Los deslizaba dentro y fuera, mientras chupaba su clítoris.
Su cuerpo entero estaba tenso, y entonces… el mundo estalló a su alrededor. Perdió la lucha de permanecer silenciosa y gritó, mientras su orgasmo arrasaba todo su cuerpo.

domingo, 20 de mayo de 2012

Capítulo 19:


Capitulo no apto para menores de edad! si deciden leerlo en bajo su responsabilidad NO mia! que conste que avise ;) jajajaja

 —¿Después de lo qué oíste, cómo puedes dudar? —preguntó, mirándolo igual de atenta.
Se pusieron en posición de ataque, ninguno bajaba los ojos, fulminándose.
El se relajó y le pidió.
—Ven aquí.
Cruzó la sala, para quedar delante de él.
Él la atrajo a sus brazos y la besó.

Capítulo 18:

Buscó a los otros, pero la casa estaba silenciosa. Respiró hondo y cruzó la sala, hasta llegar tras Juan.
—¿Juan? —le llamó, exasperaba inseguridad de su voz.
Él giró la silla y la miró inquisitivamente.
—¿Puedo hacerte algunas preguntas?
—Desde luego.
Se levantó, la agarró por la mano y la hizo sentarse en el sofá.
—Vamos a ponernos cómodos.
Ella se sentó a su lado, cuidando de mantener una distancia segura. Un toque y probablemente se echaría en sus brazos e implorara que le hiciera el amor.
Lo miró fijamente por un largo momento, después reunió el coraje y preguntó:
—¿Eso va en serio?

Capítulo 17:


—Esto cambia un poco las cosas —dijo Thiago cuando entró con sus hermanos en el cuarto.
—¿De qué estás hablando? —preguntó Peter.
— Mariana es virgen —dijo Juan.
Peter irguió una ceja, pero no dijo nada. Simplemente lanzó a Thiago una mirada interrogativa.
—¿Qué? —cuestionó Thiago, sabiendo que habían muchas cosas en la mente de su hermano menor.
Peter suspiró y puso las manos en el bolsillo de sus vaqueros.
—¿Cómo sabemos qué no cambiará de idea? ¿Cómo sabemos que no se calmará y volverá con su esposo?

Capítulo 16:

Thiago alejó un poquito a Mariana y enmarcó su rostro con las manos.
—Escúchame, cariño. No lo dejaremos herirte. Te lo juro.
Ella lo miró durante un largo momento, y asintió lentamente.
El dejó salir un gruñido de satisfacción.
—Ve a llenar la bañera, Peter.

sábado, 19 de mayo de 2012

Capítulo 15:

—Lo mataré.
Durante un momento, Juan pensó que había dicho sus pensamientos en voz alta, pero entonces descubrió a Peter detrás de él.
—¡No! —protestó ella—. Por favor, llévenme a casa. Él no debe verme. ¡Por favor!
—No dejaremos que te lastime, muñeca —la calmó Juan. Se giró hacia Peter—. Trae el jeep a la parte de atrás. La llevare allí.
Volvió su atención hacia Mariana y la alzó suavemente. Envolviéndola contra su pecho, anduvo a pasos largos hacia la salida de detrás de la tienda, manteniéndola escondida.
Se paró unos breves momentos, cuando divisó la mirada fija y curiosa del propietario.

Capítulo 14:


Thiago se inclinó hacia adelante y le dio un suave beso. Fue sorprendentemente gentil. Por primera vez, ella levantó la mano para tocarlo, recorriendo su rostro con los dedos, sintiendo las ligeras puntas de su barba.
Cuando él se alejó, sus ojos ardían de pasión y ella se sintió embriagada por el conocimiento de cómo lo afectaba.

Capítulo 13:






Mariana se sentó en el banco, entre Peter y Thiago, mientras que Juan servía los platos con jamón y huevos. Ella los analizaba frecuentemente, juzgando su humor, midiendo su reacción hacia ella, pero le parecían tranquilos.
Era como si ellos vivieran esta situación todos los días. Sacudió la cabeza mientras cogía con el tenedor otro trocito de huevo. ¿Cómo podía funcionar esa clase de relación? Los celos serían inevitables. Y las cosas serían más difíciles para ella que para cualquiera de ellos. Ellos tendrían solo una esposa que satisfacer, ella tendría tres.

Capítulo 12:


—Es solo que eres tan...
—Tan... ¿qué? —insistió.
—Tan grande —se le escapó.
Arqueó la ceja.

Capítulo 11:


Asintió, sin arriesgarse a hablar. Sin confiar de que no se lanzaría en sus brazos.
Como si estuviera leyendo su mente, caminó relajado en su dirección, y le extendió la mano.
Lentamente, ella la alcanzó y la aceptó, gustándole el calor que se extendió por su brazo, con una velocidad alarmante.
Él la atrajo hasta quedar a su lado. Su mirada se deslizó sobre ella, calentando cada zona por donde pasaba.
—No me besaste —murmuró él.

Hoy maraton :)




viernes, 18 de mayo de 2012

Capítulo 10:



Thiago sintió a unos dedos helados apretando su corazón. ¿Ya estaba casada? Vio el mismo miedo en el rostro de sus hermanos. Miró su mano, en busca de alianza, pero no había ningún anillo.
Las manos de Juan estaban paralizadas en sus hombros. Peter apartó la mano, y él alejó la mano de su mejilla. ¿Cómo podía ser prohibida la mujer destinada a ellos?
No, él no aceptaría eso. No podía.

Capítulo 9:


Se mojó los labios, nerviosa. Después preguntó.
—¿Eso significa qué no van a dejarme ir?
Él se rió.
—Si me estás preguntando si eres una prisionera, la respuesta es no. Y si me estás preguntando si vamos a abrirte la puerta y permitirte que salgas de nuestras vidas, la respuesta es no.
Él se acercó más y la cogió por la barbilla. La respiración de ella se aceleró. Del otro lado, Peter, agarró su mano. Los tres hermanos la estaban tocando, calmando.

jueves, 17 de mayo de 2012

Capítulo 8:




—Para de asustarla, Juan.
—Nosotros nunca te haríamos daño, Mariana. Vas a descubrir rápidamente que haremos cualquier cosa para salvarte, para protegerte —dijo Juan,, tomándola en los brazos.
Ella se acomodó en sus brazos, mientras que él caminaba hacía la casa. Su mente luchaba para entender la extraña conversación que tuvo con los hermanos. Peter abrió la puerta y Juan entró con Mariana en los brazos.
Thiago estaba cerca, con los brazos cruzados, y una expresión impenetrable.

Capítulo 7:






Soñó con ellos. Llegaron para alejarle la pesadilla. Un dulce bálsamo para sus lastimados sentidos. Sustituyeron las imágenes del demonio y del infierno. Sus manos la calmaban sin herirla. Thiago, Juan y Peter, con su toque gentil, pero exigente, los labios adorando su cuerpo.
Mariana despertó llena de sudor, necesidad y una buena dosis de vergüenza. Quizá no era mejor que una meretriz. Quizá Pablo tenía razón.

miércoles, 16 de mayo de 2012

Capítulo 6:




—Voy a encontrarla —dijo Juan. Su tono sugería que cuidaría a Mariana, mientras que Thiago y Peter resolvían la amenaza de fuera.
Sorprendentemente, la puerta se abrió y Maria Del Cerro se asomó.
—¿Estan adentro? —gritó ella. Paró cuando vio a Thiago y Peter.

martes, 15 de mayo de 2012

Capítulo 5:



Captó su grito de placer con la boca. Lentamente, retiró la mano de su centro. Él podía sentir su esencia en su mano y quiso saborearlo. Estaba dolido por enterrar su eje entre sus piernas y amarla como nunca lo estuvo.
Sus ojos se abrieron somnolientos, los labios hinchados de sus besos.
—Dime que no estoy soñando —susurró ella.

lunes, 14 de mayo de 2012

Capítulo 4:





Holaaa :)
Para las que no le gusta lo zarpado a partir de que Thiago entra al cuarto donde esta Mar no lo lean :)



Maldiciendo por lo bajo, Thiago sosuvo la cabeza de Mariana mientras ella se caía. La sacó de la silla y la agarró en los brazos. Estaba claro que estaba exhausta y probablemente hambrienta, como lo indicaba su delgadez.

domingo, 13 de mayo de 2012

Capítulo 3:

Ella se estremeció. No de miedo, si no del blocked appeal de aquella voz. ¿Cómo podía sentirse segura con un desconocido? Se lamió los labios.
—Soy Mariana —su voz era poco más que un murmullo.
Uno de los hermanos se levantó del sofá y la empujó hacía la chimenea.

sábado, 12 de mayo de 2012

Capítulo 2:

Thiago asintió, sin saber que decir. Sabía que Peter necesitaba aceptarlo. Peter miró a la mujer, pero no se acercó.
—Esperaré hasta que acabes. No quiero que se despierte y encuentre a dos hombres en el baño. Podría asustarse.
—No tardaré —dijo Thiago, intentando interpretar las sombras de los ojos de Peter—. Hazme el favor de meterle las ropas en la secadora.
Peter se encogió los hombros y salió del baño, cerrando silenciosamente la puerta detrás de él.

viernes, 11 de mayo de 2012

Capítulo 1:


Thiago Lanzani se abrigó más y bajó el Stetson, mientras salía. Bajó por el sinuoso pavimento hasta el buzón, con el rostro entumecido por el áspero viento. El invierno acababa de comenzar y él ya estaba inquieto. La casa estaba silenciosa, alojando solo a él y a sus dos hermanos, hasta la próxima temporada de caza, cuando se llenaría de clientes. Durante diez años, guió a los cazadores a través de las montañas. Pero ahora se sentía nervioso. Insatisfecho.
Abrió el buzón y agarró los sobres. Se volvía a la casa, hojeando sin interés los sobres, cuando le llamó la atención un destello oscuro. Él parpadeó, volviendo a mirar. Allí, en la zanja, mitad cubierta por la nieve, había una persona.

Nueva nove :)

Holaaa :)
¿como estan? al fin viernes! que lindo!
Bueno como no comentaban la otra novela decidí subir esta que me gusto mucho, haber que les parece...

LA MUJER DE LOS LANZANI


Mariana Espósito está huyendo de los errores que cometió... justo en los brazos de los hermanos Lanzanni.