miércoles, 13 de marzo de 2013

Capítulo 38:




Cuál de ellos, Lali? preguntó Víctor con urgencia.
“Aléjate de mí!” Tiré las cubiertas de la cama sobre mi cabeza. “Sal de mi
cabeza.”


Farstein suspiró y cerró su anotador. “Puedo ver que le estamos haciendo
mayor daño que bien aquí, Sra. Rinaldi. Dejaremos que Lali descanse un poco.
Agente Lanzani, quisiera tener unas palabras con ud.”
Víctor asintió. “En el pasillo. Tranquilízate, Lali Sky. Ya recordarás.”
Los dos hombres se fueron. Bajé los cobertores para encontrar a Sally
mirándome con miedo en sus ojos.
“Me estoy volviendo loca, no?” le pregunté. “No puedo recordar  y lo que
recuerdo se siente mal.”
Me acarició los nudillos con su pulgar. “No estás loca. Te estás recuperando
de un trauma. Toma tiempo. Creemos que la gente que hizo esto probablemente
está muerta, murieron en el tiroteo. La policía sólo está intentando atar los
cabos sueltos.”
Desearía que alguien atara los cabos sueltos en mi cerebro. Mis pensamientos
eran como retazos de tela despedazados de alguna fiesta abandonada, que se
mecían con el viento  sin un propósito, ni un ancla.
“Si Peter Y Xav no me secuestraron, entonces por qué pienso que sí lo
hicieron?”
El Día de Acción de Gracias llegó y partió, la única señal fue la cena con
pavo en el hospital. Mi cabeza no estaba más despejada. Me sentía como una
playa luego del paso de un tsunami, obstáculos y terminaciones tiradas sobre
la costa, todas fuera de lugar, hechas trizas. Estaba conciente del paso de una
fuerte emoción que me atravesó pero no podía descifrarlo, qué había sido real, y
qué falso. Había dejado algo suelto en mi interior y no lo controlé – el resultado
había sido devastador.
Peter y su hermano habían sido exonerados de toda sospecha por el
Departamento de Policía de Las Vegas. Entonces por qué los había acusado?
Me carcomía la culpa de que los hubiera involucrado en esto, estaba demasiado
avergonzada como para ver a alguno de los Lanzani. Les hice prometer a mis
padres que no los dejarían entrar – no podía enfrentarlos. Sin embargo no fui
capaz de mantener a Víctor fuera; él vino en numerosas ocasiones con Farstein
para ver si recordaba algo más. Me disculpé con él y con el policía, por haberme
equivocado, pero no me sorprendería si ahora Víctor me odiara.
“Pesadillas, Señorita Rinaldi, eso es lo que son,” dijo Farstein con un tono
práctico. “Ha atravesado una experiencia aterradora y su mente se enredó.”
Él estaba siendo amable, pero podía notar que me había desechado como
inútil para sus investigaciones. Todos estaban de acuerdo en que yo había sido
secuestrada, pero nadie podía probar que alguien más allá de esos dos hombres
hubieran estado involucrados. Yo era la clave pero no les estaba abriendo
ninguna puerta.
Farstein me trajo un maso de cartas y un manojo de flores en su última
visita. “Aquí tiene, Señorita Rinaldi, espero que esto la ayude a sentirse mejor.”
Abrió el paquete y barajó. “Imagino que deber estar aburrida de estar metida
aquí. Mi ciudad es un buen sito para visitar para la mayoría de la gente; lamento
que la haya pasado tan mal con nosotros.” Cortó el maso y me repartió una
mano.
Víctor estaba en el fondo, observándonos desde la puerta. “No estarás
corrumpiendo a la chica, verdad Farstein?”
“No puede dejar Vegas sin haber probado algún juego de azar.”
“No conozco muchos juegos,” admití.
“Quedémonos con Snap entonces.”
“Qué si gano?”
“Te quedas con las flores.”
“Y si pierdo?”
“Aún así te quedas con las flores, pero tendrás que darme una para llevarme
aparte.”
Farstein se marchó con un clavel en su solapa. Víctor se quedó atrás. Se
quedó parado mirando por la ventana por un instante, su inquietud era
evidente.
“Lali, por qué no quieres ver a Peter?”
Cerré mis ojos.
“Él está realmente deshecho. Nunca antes lo he visto así. Sé que se culpa
así mismo por lo que te sucedió, pero lo ha descolocado de una manera
impresionante.”
No dije nada.
“Estoy preocupado por él.”
Víctor no era de los que le confiesa algo a alguien que no fuera su familia. Él
realmente debía estar preocupado. Pero qué podía hacerle? Apenas encontraba
el coraje de levantarme cada mañana.
“Se metió en una pelea anoche.”
Una pelea? “Se encuentra bien?”
“De la revuelta? Seeh, fue más una discusión de palabras que de puños.”
“Con quién se peleó?”
“Un par de chicos de Aspen. Fue en busca de eso, Lali. Y en respuesta a tu
otra pregunta, él no está bien. Está sufriendo. Es como si estuviera sangrando
por dentro, en alguna parte que cree nadie puede ver.”
“Lo siento.”
“Pero no vas a hacer nada al respecto?”
Las lágrimas amenazaban con salir. “Qué quieres que haga?”
Extendió su mano hacia mí. “Deja de excluirlo. Ayúdalo.”
Tragué. Había un dejo de rudeza en Víctor que no me dejaría echarme atrás
con la excusa de mi confusión – era tanto aterradora como desafiante. “Lo…lo
intentaré.”
Su mano se enrroscó en un puño antes de dejarla caer. “espero que lo hagas,
porque si algo malo le sucede, no voy a estar contento.”
“Es eso…una amenaza?”
“No, simplemente la verdad.” Negó con la cabeza, su irritación, clara. “Tú
puedes atravesar esto Lali.. Empieza a mirar fuera de ti misma  eso te ayudará a
sanar.”
A fines de noviembre fui dada de alta del hospital, pero mis padres habían
decidido, en base al consejo de los doctores, no llevarme directo a casa.
“Demasiadas asociaciones angustiantes en Wrickenridge,” les dijo el Dr
Peters, mi psiquiatra de consulta. “Lali necesita reposo absoluto y nada de
estrés.” Les recomendó una casa de reposo en Aspen y fui debidamente
registrada y asignada a mi propia habitación, algo que sólo nos podíamos
permitir gracias a la generosidad de un benefactor anónimo de Las Vegas que
había escuchado acerca de mi caso en las noticias.
“Esto es un manicomio, no?” Le pregunté sin rodeos a Simon mientras
Sally desempacaba mis escasas pertenencias en los cajones de la cómoda.
Mi habitación tenía una vista a los jardines nevados. Podía ver a una chica
caminando alrededor del estanque una y otra vez, perdida en su mundo, hasta
que una enfermera llegó para buscarla y obligarla a entrar.
“Es una clínica de reposo,” me corrigió Simon. “Tú no estás lista para
regresar a la escuela aún y no nos podíamos costear permanecer en Vegas por
más tiempo, de modo que esto es lo mejor que se nos ocurrió.
Sally se paró y cerró el cajón. “Podríamos regresar a Inglaterra, Simon. Puede
que Lali se sienta mejor entre sus viejos amigos.”
Viejos amigos? Me mantenía en contacto con alguno de ellos por Facebook
pero en cierta forma la vieja cercanía se había ido evaporando cuanto más
tiempo llevaba lejos. No sería como regresar a lo que había sido.
Simon me dio un abrazo de un solo brazo. “Si eso es lo que se requiere, lo
haremos, pero un paso a la vez, si?”
“Tenemos clases que impartir en el Centro de Arte,” explicó Sally. “Pero uno
de nosotros pasará todos los días. Quieres ver a tus amigos de Wrickenridge?”
Jugué con la cuerda de la cortina. “Que les han dicho?”
“Que tuviste una mala reacción al trauma de tu secuestro. Nada demasiado
serio pero que necesitabas tiempo para recuperarte.”
“Pensarán que estoy demente.”
“Pensarán que estás sufriendo – y lo estás – podemos verlo.”
“Me gustaría ver a Cande y a Zoe. A Nico también si es que quiere venir.”
“Y qué tal con Peter?”
Recliné mi cabeza contra el congelado vidrio. El gesto me provocó una
regresión momentánea – una torre alta, carteles de neón. Me estremecí.
“Qué sucede amor?”
“Estoy viendo otras cosas ahora, cosas que no tienen sentido.”
“Tienen que ver con Peter?”
“No.” Y no tenían que ver con él, me di cuenta. Peter no había estado allí. Y yo
había estado estancada. Le prometí a Víctor que lo intentaría. Tal vez si veía a
Peter, ayudaría a poner las cosas en claro. “Me gustaría ver a Peter también, sólo
por un rato.”
Simon sonrió. “Qué bien. El chico ha estado preocupadísimo por ti, nos llama
a toda hora del día y la mayor parte de la noche.”
“Has cambiado de parecer acerca de él,” murmeré, repentinamente
recordando con total claridad la discusión que tuvimos acerca de él hacía un
mes. No había dicho Peter que me amaba? Entonces por qué me sentía como si él
fuera mi enemigo?
“Bueno, no puedes evitar que te caiga bien alguien que camina directo a una
trampa para sacar a su chica.”
“Lo hizo?”
“No lo recuerdas? Él estaba allí cuando resultaste herida.”
“Sí, él estaba, no?”
Simon me dio un apretoncito en el hombro. “Ves? Está volviendo.”
Los días siguientes se pasaron tranquilamente. Me los pasé leyendo una pila
de novelas, sin abandonar mi habitación. Mi cuidadora era una mujer maternal
proveniente de California que tenía mucho que decir respecto de los inviernos
en Colorado. Iba y venía todo el día, pero me dejaba por mi cuenta la mayor
parte del día. Cerca de las cinco, justo antes que acabara su turno, llamó a la
puerta.
“Cariño, tienes visitas. Los hago subir?”
Cerré mi libro, mi ritmo cardíaco acelerándose. “Quién es?”
Se fijó en la lista. “Candela Vetrano, Zoe Stuart, y Nicolas Hoffman.”
“Oh.” Sentí una mezcla de alivio y decepción. “Seguro, envíelos.”
Cande asomó la cabeza por la puerta primero. “Hola.”
Se sentía como un siglo desde la última vez que la había visto. No me había
dado cuenta de cuánto extrañaba su explosiva cabellera de rastas cobrizas y sus
llamativas uñas.
“Pasen. No hay mucho espacio pero pueden sentarse sobre la cama.” Me
quedé en mi silla junto a la ventana, con las rodillas hasta el pecho. Mi sonrisa
se sintió debilucha de modo que no insistí mucho.
Zoe y Nico la siguieron, todos luciendo un poco incómodos.
Cande colocó una maceta de ciclamen rosa sobre la mesita de luz. “Para ti,”
dijo.
“Gracias.”
“Entonces…”
“Entonces cómo han estado chicos?” me apuré a preguntar. La última cosa
que quería era tener que explicar sobre mi cerebro completamente revuelto.
“Bien. Todos estuvimos preocupados por ti – realmente atónitos. Nada como
esto había sucedido antes en Wrickenridge.”
Mi vista se desvió hacia la ventana. “Supongo que no.”
“Recuerdo haber estado bromeando contigo acerca de eso cuando llegaste
– me sabe horrible que hayas tenido que descubrir así que estaba equivocada.
Estás, ya sabes, bien?”
Dejé escapar una risa vacía. “Mira a tu alrededor Cande, estoy aquí, no?”
Nico se puso de pie repentinamente. “Lali, si pudiera atrapar a los tipos que
te hicieron esto, los mataría!!”
“Creo que ellos ya están muertos. Al menos, eso es lo que la policía piensa.”
Cande arrastró a Nico nuevamente hacia la cama. “No Nico. Recuerda,
prometimos no alterarla.”
“Lo siento Lali.” Nico puso su brazo alrededor de Cande y le dio un beso en la
parte superior de la cabeza. “Gracias.”
Qué era esto? No pude evitar sonreir – mi primera sonrisa genuina en un
largo tiempo. “Hey, están ustedes dos….?”
Zoe puso los ojos en blanco y me ofreció una goma de mascar. “Seeh, lo están
total y completamente. Me vuelven loca, los dos. Tienes que salir adelante Lali,
y mantenerme cuerda en la escuela.” Gracias al cielo por Zoe y sus bromas sobre
la locura, me hacía sentir mucho más normal.
“Cuándo, cómo?” Imité uno de los gestos favoritos de Cande – una pálida
imitación de su gesto con sus largas uñas pero era algo. “Dame los detalles,
hermana.”
Cande miró al piso, algo avergonzada. “Cuando fuiste, ya sabes, secuestrada,
Nico se portó realmente fantástico. Evitó que me volviera loca. Pensé que fue
mi culpa – con lo que le sucedió al auto y todo eso.”
Nico le acarició el brazo. “Sí, por una vez, Cande vio mi lado bueno.”
“Estoy tan contenta – por ambos. Se merecen el uno al otro,” dije.
Cande se rió. “Es como qué, una maldición China?”
“No boba,” le tiré mi almohadón, “es un cumplido.”
Se quedaron cerca de una hora. Siempre y cuando nos mantuviéramos lejos
del tema de mi secuestro, me sentí bien. No tuve problemas para recordar cosas
acerca de la escuela, no había dolor, ni confusión. Comencé a sentirme como mi
antiguo yo.
Cande miró su reloj y le hizo señas con la cabeza al resto. “Será mejor que nos
vayamos. Tu siguiente visita está prevista para las seis.”
Le di a cada uno un abrazo. “Gracias por venir a ver a la pobre chica
desquiciada.”
“No hay nada de malo contigo que un poco de tiempo no pueda curar, Lali.
Regresaremos pasado-mañana. Sally dijo que creía que estarías aquí al menos
hasta el fin de semana.”
Me encogí de hombros. El tiempo no me parecía importar demasiado. Salí de
mi rutina normal. “Eso espero. Los veré entonces.”
Se fueron, intercambiando saludos con alguien en el pasillo. Fui hacia la
ventana para verlos partir pero no pude localizar el estacionamiento desde mi
habitación.
Hubo un suave llamado a mi puerta.
Me giré, esperando ver a Sally. “Pasa.”
La puerta se abrió y Peter dio un paso sobre el umbral. Se detuvo, inseguro de
si sería bienvenido.
“Hola.”


Continuara...

Luli :) El don de Lali es lo de ver las auras y saber como es la persona o cosas sobre él

Subo otro si hay 20 firmas...

31 comentarios:

  1. mmmmmmmaaaaaaaaaaaaaasssssssssss

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  2. aaaaaaaaaaah que bueno que me lo aclaraste
    @22lulii

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  3. porfa sube masssssssssss

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  4. aaaaaaaaaaaaaa me dejaste intrigada subee

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  5. mas mas mas mas mas mas mas mas mas

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  6. El benefactor anónimo puede ser que sea kelly?? que le conviene que se quede en las vegas??

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  7. Me genera MUCHA intriga esta novela y eso me encanta
    @22lulii

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  8. Ojala que la visita de peter le aclare las ideas
    @22lulii

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  9. maaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaas

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  10. desvelandome por tu nove con escuela mañana pero me encanta

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  11. Pobre Peter, debe estar desecho

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  12. Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh mas

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  13. Quiiero saber YA qe pasa

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  14. Me encanta la foto de cande y nico, nunca la habia visto
    @22lulii

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  15. Un momento d paz con sus amigos.Espero k con Peter no se altere demasiado, no es lo mismo el caos k causaron en su cabeza a tenerlo a el al frente,ahi ella ve su aura y como es Peter en verdad.Al menos antes recordaba k era su soldier,espero k eso al menos lo mantenga presente.

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  16. jhyu78i9kmjnhjuikmnhjukmju ok te iba a preguntar sobre el don de lali pero ya lo respondiste, ahora me encataria q Petersin la ayudara a recordar lo verdadero, CAAAPAZZ SI UNA JEFA DE MINISTROS LA HACE VER EN UNA COMPU SU BESO EN LA PLAYA CON PETER RECUERDA TODO, AAH NO cierto no es casi angeles arre
    MAAAS
    Beso,Anto

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  17. masssssssssssssssssssssssssssssssssss

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  18. quiero otroo me encanta tu nove :)

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  19. llego!

    novela solo tu: http://morithalaliter.blogspot.mx/

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  20. pobrecito mi vida :'( esta sufriendo me imaginooo como debe estar!!!! ♥ que venga yo lo consuelo(? jajajaja ME ENCANTOOOOo fowrijifweojfewj que pasara!?!? @LuciaVega14

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Gracias por leer. Espero tu comentario :)