Peter mantuvo la
puerta abierta para Lali y la guió adentro del banco.
Su primera
experiencia de conducir había salido bien, pensó. De hecho, él
había descubierto
lo mucho que le gustaba manejar ese pequeño coche deportivo
color rojo. Y
después de que ella le había enseñado a hacer los cambios, al instante
lo había
entendido. No es que le había dado a saber lo rápido que había aprendido
en realidad. Había
fingido que aún tenía dificultades, para que ella mantuviera su
mano sobre la
palanca de cambios. Era una excusa perfecta y legítima para tocarla,
al igual que
ahora, cuando le tomó la mano y la colocó en su antebrazo para guiarla
a través del
ocupado vestíbulo.
Se dio cuenta de
la inquietud de Lali.
— ¿Estás bien?, —
le preguntó Peter.
Ella se encogió de
hombros. — Sí, estoy bien. El gerente del banco conoce
bien a mi familia,
estoy segura que seré capaz de convencerlo de que me dé una
extensión de unas
pocas semanas.
Ella le había
dicho acerca del propósito de su visita en el camino hacia allí.
Debido a su
estancia en el hospital, las renovaciones se habían retrasado un par de
semanas, y la
apertura del Bed & Breakfast tendría que ser pospuesta, una de las
primeras
consecuencias era que el dinero del pago de los clientes, sería más tarde de
lo previsto. Y ese
era el dinero del cual Lali dependía para realizar el pago de su
hipoteca.
Peter asintió con
la cabeza y le acarició la mano. — Vas a estar bien. — Él
la acompañó hasta
la recepción. La mujer que estaba sentada detrás del escritorio
de inmediato se
enderezó y puso una gran sonrisa en su rostro.
— ¿Puedo ayudarle?
— La pregunta iba dirigida a él, no a Lali. Al igual
que las pestañas
que se batían. Obviamente.
— Sí, estoy aquí
para ver a Clive Henderson, — anunció Lali.
Sin apartar los
ojos de Peter, la recepcionista le preguntó: — ¿Al Sr.
Henderson? ¿Está
segura?— La mujer se humedeció los labios y por debajo de las
pestañas, le dio
una mirada seductora.
— Sí. Hicieron la
cita para mí la semana pasada. Soy Lali Esposito.
— Un momento. —
Con un movimiento a regañadientes, la recepcionista
levantó el
auricular y marcó. — Sí, es Pippa. Lali Esposito está aquí para ver el Sr.
Henderson. — Ella
hizo una pausa, y asintió con la cabeza. — Eso es lo que yo
pensaba también.
No, al parecer, la semana pasada. Claro. Muy bien. Lo haré.
Pippa desconectó
la llamada y señaló hacia un ascensor detrás de ella.
— Vaya hasta el
quinto piso. El asistente la encontrará allí.
— Gracias, —
respondió Lali.
Peter la tomó del
brazo nuevamente y la condujo hacia los ascensores.
Sintió que tenía
la piel de gallina. — No te preocupes, todo irá bien. No hay
necesidad de estar
nerviosa.
Los segundos que
pasaron en el ascensor, fueron una tortura para Peter. Su
fragancia al
instante se extendió por el pequeño espacio y lo hizo muy consciente
de su cercanía. Si
ellos se quedaban atascados ahí, si el ascensor se detenía y se
veían obligados a
quedarse solos por un período prolongado de tiempo, él no sería
capaz de
controlarse a sí mismo. Él la presionaría contra el frío acero de la cabina y
la besaría hasta
que perdiera el aliento. Y entonces él…
Peter se aclaró la
voz. Era una estupidez dejar que su imaginación
desenfrenada
corriera así. Todo guiaba a una erección y un deseo insaciable por
Lali.
Cuando las puertas
del ascensor se abrieron después de lo que pareció una
eternidad, al fin
pudo respirar de nuevo.
Un asistente los
condujo adonde se encontraba una oficina grande en la
esquina con vistas
a la ciudad. El hombre detrás del escritorio era de unos
cincuenta años,
canoso, y por su aspecto, no había sonreído en un siglo.
Permaneció sin
expresión cuando vio a Lali. Qué clase de amigo de la familia
era éste, Peter se
preguntó.
— Buenos días, — Lali
le saludó y tendió su mano en su dirección.
Él caminó
alrededor de su escritorio. — Señorita Esposito, soy el señor
Morton.
Lali al instante
retiró la mano. — Oh, creo que llegamos a la oficina
equivocada, lo
siento, que…
— Usted está en la
oficina correcta señorita Esposito. El Sr. Henderson ya no
está con nosotros.
Peter notó un
ligero temblor en el cuerpo de Lali y le acarició su brazo
en un movimiento
suave.
— Pero, hice la
cita la semana pasada.
Morton le dio una
mirada impaciente. — El señor Henderson ya no está
más a cargo. Yo lo
estoy. Así que, por qué no toma asiento, y veremos lo que
quería hablar con
él.
Señaló a las dos
sillas en frente de su escritorio. Peter asistió a Lali antes
de que tomara la
silla a su lado.
— ¿Y usted es?, —
preguntó el banquero a Peter.
— Este es mi…
Peter apretó la
mano de Lali para interrumpirla. Algo en el
comportamiento del
Sr. Morton le dijo que la explicación de Lali de que él era
su enfermero, la
pondría en una posición débil. — Yo soy el prometido de la
señorita Esposito.
Peter Lanzani.
Antes de que Peter
supiera lo que estaba haciendo, la mentira se derramó
de sus labios, más
fácil que el agua de un grifo. Bueno, al menos le demostraría al
hombre que ella tenía
apoyo y que no podía meterse con ella.
La sacudida en el
cuerpo de Lali fue sólo perceptible para Peter, y él lo
tomó con calma.
Tendría que explicarle el por qué a ella más tarde. Por el
momento, era mejor
seguir con la farsa.
— Ya veo. Señorita
Esposito, ¿puedo hablar con franqueza frente a su
prometido? Como
usted sabe, los registros financieros están sólo a su nombre.
Lali asintió con
la cabeza sin dejar de verse un poco traumatizada. — Por
supuesto, Sr.
Morton. Mi, eh, mi prometido puede escuchar todo lo que tiene que
decir. Morton,
vine a ver al Sr. Henderson a…
El banquero
levantó la mano. — Le eché un vistazo a su archivo, señorita
Esposito, y vi las
notas que Henderson hizo antes de su, eh, partida. Entiendo que los
pagos se iniciarán
en dos semanas. ¿Es eso correcto?
— Sí, y es por eso
que quería hablar con usted acerca de una posible…
De nuevo el hombre
la interrumpió. Su comportamiento era francamente
grosero. — La nota
aquí también dice que usted ha estado en el hospital durante un
período prolongado
de tiempo y no pudo continuar con la renovación del Bed &
Breakfast.
Señorita Esposito, ¿confío en que usted está bien otra vez?
Peter vio el
brillo sospechoso en los ojos del hombre y respondió por ella
— Lali está
perfectamente bien. No hay nada de qué preocuparse.
— Bien. No me
gustaría que la inversión del banco estuviera en peligro
debido a una
enfermedad prolongada.
— Por supuesto que
no, — interrumpió Peter.
Lali se movió en
su silla. — Señor Morton, mientras estuve en el hospital,
ciertas cosas se
retrasaron, y me temo que la apertura del Bed & Breakfast esté
retrasada.
La expresión del
banquero se endureció, y Peter supo que el hombre no
cedería ni un
centímetro cuando se tratara de la concesión del préstamo. Había
visto a los de su
tipo antes. Él seguiría las reglas y no mostraría ninguna
flexibilidad. Una
triste historia no lo afectaría. A Peter le dieron ganas de sacar a
Lali fuera de la
oficina del hombre, pero ella parecía decidida a obtener lo que
había venido a
buscar.
— Por ello me gustaría
pedir al banco una extensión del tiempo, hasta que
pueda hacer mi
primer pago dentro de cuatro semanas.
— ¿Cuatro
semanas?, — preguntó Morton y se puso de pie detrás de su
escritorio. — No
creo que entienda, Señorita Esposito. El Sr. Henderson nunca debió
haber extendido
este préstamo en primer lugar. Usted no tiene experiencia en lo
que respecta a la
industria hotelera, no tiene otros ingresos, ni hablar de una cuenta
de ahorros, y
ahora aparte de eso, no puede mantener las fechas. ¿Por qué no
admite que usted
ha tomado más de lo que puede manejar?
Continuara....
+ 15 y otro!
No voy avisar ni por twitter ni por face porque estoy haciendo otras cosas, asique ATENTAS!
mas!
ResponderEliminarrock laliter ,aca falta sexo ah re satira
ResponderEliminarNOVELA NOVELA NOVELA
ResponderEliminarMAAAAAAAAAAAS!!!!!
ResponderEliminarQUIERO OTROOOOOOOO!!!!!
ResponderEliminarsube maaaas
ResponderEliminarotro otro otro
ResponderEliminarQue forro!! Más Me encanta!
ResponderEliminarMAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAS!!!!! :)
ResponderEliminarMAAAAS!!
ResponderEliminarMAS NOVE!
ResponderEliminarME ENCANTA! MAAAS :D
ResponderEliminarMAAAS! OTRO.
ResponderEliminarMAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAS NOVEEE!
ResponderEliminarMAAAAS! ME ENCANTA LA NOVE!
ResponderEliminarOTROOOOO! MAS NOVE, ME ENCANTA :D
ResponderEliminarotrooo porfi me encantooo! :)
ResponderEliminarMASSSSSS
ResponderEliminarMaaas!!!
ResponderEliminarYo quiero que mienta por miii ♥.♥ jajajajaja me encantaaaaa @LuciaVega14
ResponderEliminarmeteme a la historia que voy a matar a ese señor :P
ResponderEliminarnovela solo tu: http://morithalaliter.blogspot.mx/
Ke tipo mas desagradable
ResponderEliminarpero ush q hombre odio a los banqueros
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