domingo, 30 de septiembre de 2012

Capítulo 73:




— Hola, Candela.
Peter  la escuchó hablar con el corazón pesado como el plomo, luchando contra el fuego que lo arrasaba.
Lo último que quería era dejar este refugio. Jamás había disfrutado tanto en su vida como desde que conoció a Lali. Y ahora estaba ansioso por pasar con ella cada segundo del tiempo que disponían para estar juntos. 

— Espera y le pregunto. —Lali volvió a su lado—. Candela y Victorio quieren saber si nos apetecería salir con ellos el sábado.
— Tú decides —le contestó Peter, esperando que declinara la invitación.
Ella sonrió y se colocó de nuevo el teléfono en la oreja.
— Eso suena genial, Cande. Será muy divertido… Vale. Nos vemos entonces. —Dejó el teléfono en su sitio—. Voy a darme una ducha rápida antes de ir a la cama. ¿Vale?
Peter asintió. La observó subir las escaleras. Deseaba más que nunca volver a ser mortal.
Daría cualquier cosa por poder seguirla en ese momento, tumbarse junto a ella en la cama y enterrarse profundamente en su cuerpo.
Cerrando los ojos podría jurar que era capaz de sentir la humedad de Lali rodeándolo.
Se mesó el cabello. ¿Cuántos días más podría soportar esta tortura?
Pero quería luchar contra ella. Se negaba a rendirse, a entregar su cordura un segundo antes del plazo que las Parcas habían decretado.
Lali sintió la presencia de Peter. Se giró y lo vio de pie junto a la bañera, completamente desnudo.
Lali  dejó que su mirada se recreara con avidez en cada centímetro de aquel cuerpo bronceado, pero fue su sonrisa, cálida y fascinante, la que le robó el corazón y la dejó sin aliento.
Sin decir una sola palabra, él se metió en la ducha.
— ¿Sabes? —comentó con una naturalidad que la dejó pasmada—. Esta mañana encontré algo interesante.
Ella observó cómo el agua resbalaba sobre él, mojándole el pelo hasta convertirlo en una masa de rizos húmedos que caían sobre su rostro.
— ¿Sí? —contestó ella, resistiéndose al impulso de alzar el brazo y coger uno de sus rizos. O mejor aún, mordisquearlo.
— Mmm —murmuró Peter, deslizando la mano por el cordón de la ducha hasta sacarla de su soporte en la pared. Giró hasta encontrar la posición de un ligero masaje—. Date la vuelta.
Lali  dudó antes de obedecerle.
Peter deslizó su mirada por su espalda desnuda y húmeda. Jamás había visto una mujer más tentadora en todos los días de su vida.
Era todo lo que había soñado, pero que no podía ni siquiera anhelar. No se atrevía. Era un sueño lejano.
Bajó los ojos hasta sus voluptuosas curvas. Tenía las piernas ligeramente abiertas. Una imagen de él separándoselas y sumergiéndose en ella se abrió paso en su mente.
Esforzándose por mantener la respiración, acercó el cabezal de la ducha hasta los hombros de Lali.
— Eso es estupendo —murmuró ella.
Peter no podía hablar. Mantenía la mandíbula fuertemente apretada para controlar las voraces exigencias de su cuerpo. Su necesidad de tocarla era tan honda que hacía que el hambre y la sed que padecía mientras permanecía en el libro fuesen una broma.
Lali se dio la vuelta para mirarlo; su rostro resplandecía. Alargó el brazo para coger la manopla que se encontraba en la repisa, detrás de Peter. Él no se movió mientras lo lavaba, pasando las manos por su pecho y su abdomen, avivando la hoguera del deseo que sentía por ella.
Contuvo la respiración, anticipando el momento en que su mano bajara más y más.
Lali se mordió el labio al tocar los duros abdominales. Miró hacia arriba y vio que Peter la observaba. Tenía los ojos medio cerrados y parecía estar saboreando cada caricia que sus manos dejaban sobre su cuerpo.
Deseando complacerlo, pasó la manopla sobre los rizos oscuros de su entrepierna.Peter jadeó cuando lo tomó entre sus manos con suavidad. Ella sonrió al sentir el repentino estremecimiento que agitó su cuerpo.
La expresión de sumo placer que se veía en su rostro hizo que Lali se sintiera encandilada. Con el corazón acelerado, deslizó la mano hacia arriba, para poder acariciar su miembro hinchado.
Escuchó cómo la ducha golpeaba la bañera un segundo antes de que él la envolviera entre sus brazos y enterrara los labios en su cuello.
Lali  tembló ante la sensación de sus cuerpos húmedos, desnudos y entrelazados. El amor que sentía por él fluyó por sus venas, rogando que sucediese un milagro que les permitiera pasar la vida juntos.
En ese instante, deseó poder sentirlo en su interior. Sentir cómo el tomaba posesión de su cuerpo de la misma forma que se había apoderado de su corazón.
Mientras la torturaba con los labios deliciosamente, enterró un muslo entre sus piernas y la sensación del vello sobre su carne hizo que el sentido común de Lali acabara por derretirse.
Enfebrecida, Lali se restregó contra su muslo y se deleitó al moverse contra los duros músculos que se contraían bajo sus piernas mientras seguía lamiendo su cuello. Cuánto amaba a este hombre. Cómo deseaba escucharle decir que significaba para él tanto como él para ella.
Peter  pasó las manos a lo largo de la espalda de Lali y luego las movió hacia el frente.
Su mirada la abrasaba mientras la ayudaba a sentarse en la bañera.
— ¿Qué estás h…? —su pregunta acabó con un jadeo al sentir la lengua de Peter en la oreja.
Lali  percibió la tensión en los músculos de su brazo de él cuando cogió el cabezal de la ducha y volvió a atormentar su cuerpo con su pulsante calor. Lo movió lentamente, trazando círculos sensuales sobre sus pechos y su vientre. Enardecida por la estimulación del agua y el cuerpo de Peter, Lali luchaba por respirar.
Peter temblaba por la necesidad. Quería complacer a Lali como jamás había querido hacerlo con nadie. Deseaba verla retorcerse bajo él. Escucharla gritar cuando llegara al clímax.
Peter  le separó los muslos con el codo y dejó que el agua de la ducha cayera directamente entre sus piernas.
Lali  emitió un entrecortado gemido al ser asaltada por una indescriptible oleada de placer.
— ¿Peter? —jadeó, mientras su cuerpo se estremecía. Los dedos de Peter la penetraron y comenzaron a moverse en su interior a la vez que los chorros de agua intensificaban sus caricias.
Jamás, jamás había experimentado algo parecido. Peter giraba la muñeca haciendo que el agua cayera sobre ella en pequeños movimientos circulares, hasta que ya no pudo más.
Cuando alcanzó el orgasmo un segundo después, gritó aliviada.
Peter sonrió y mantuvo su cuerpo completamente inmóvil para no poseerla. Aún no había acabado con ella. Jamás podría acabar con ella.
Con las manos, la lengua y el cabezal de la ducha hizo que Lali disfrutara de cinco orgasmos más.
— Por favor —le rogó ella tras el último—. Ten compasión. No puedo más.
Decidiendo que ya habían tenido los dos suficiente tortura, Peter se giró y cortó el agua.
Lali era incapaz de moverse. Cualquier sensación, por pequeña que fuera, la hacía estremecerse. Observó cómo Peter se ponía de pie entre sus piernas y la miraba con una leve sonrisa.
— Acabas de matarme —balbució—. Ahora tienes que enterrar el cadáver.


Continuara....

Lo sé, ando super desaparecida por aqui :/ Pasa que estoy muy colgada terminando mi otra nove!
Bueno seguro ahora no hay nadie asique no da hacer matarón :/ Hoy estuve escribiendo y después tuve el cumple de mi tia por eso subo TAN tarde! Mañana me toca estudiar ¬¬ Asique no puedo hacer maratón... Perdón! Se vienen muchas cosas y ando con poco tiempo! 
Posiblemente les pida ideas para un concurso en el cual hay que escribir :) Otro dia les cuento bien haber que se les ocurre!
Bueno nada, Gracias x estar a pesar de mi desaparición. aunque hay poquitas firmas hay muchas visitas :) 
Me despido...
A dios
Buen domingo!
Besos
Juli♥
@amorxca

8 comentarios:

  1. Mas nove porfaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaas!
    @suugustinaa

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  2. Woowww capitulazo me encanto esta genial me encanta hahah peter 5orgasmos :0 eso si es wooww jajaj

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  3. Estoy esperando el siguiente después de este.

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  4. No se como peter puede auto torturarse así!!! JE! Me encanta más!

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  5. MUY BUENOOOOOOOOOOOOOO!!!! SUBI MAS.. CUANDO UNA MARATON?

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  6. X darle placer a Lali ,Peter se sacrifica ,y se tortura.

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  7. La mató pobre,me encantó lo q dijo Lali..."acabas de matarme,ahora tienes q enterrar el cadaver"!Pobre Peter q autocontorol!Tanto deseo reprimido sumado a la cantidad de años q lleva complaciendo sin liberarse él,el día q lo haga provoca un terremoto.Muy buen cap!

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  8. Amo la nove! te ayudo en lo que quieres! se me da bien eso jaja

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Gracias por leer. Espero tu comentario :)